Rompiendo cuatro mitos sobre las pruebas de COVID-19

A medida que las variantes se extienden y el número de casos aumenta, estamos desacreditando los mitos de las pruebas de COVID-19.

A medida que el COVID-19 continúa excediendo su bienvenida gracias a la variante Delta, es importante mantenerse informado y continuar con las pruebas para proteger a nuestras familias y comunidades.

Estamos aprendiendo mucho desde que comenzó la pandemia. Las personas ahora tienen múltiples opciones de pruebas diagnósticas de COVID-19, algunas de las cuales incluso se pueden realizar en la comodidad de su hogar. Un resultado negativo de la prueba puede brindar la tranquilidad necesaria y una mayor confianza, mientras navegamos por una nueva fase de esta pandemia.

Separar la realidad de la ficción puede ser difícil con toda la información disponible al alcance de la mano.

Pon a prueba tu conocimiento sobre las pruebas de COVID-19 mientras disipamos cuatro mitos principales.

Mito 1: ¿Las pruebas de COVID-19 pueden decirme si tengo la variante Delta?

No existe una prueba diagnóstica rápida de COVID-19 que se haya diseñado específicamente para diagnosticar un tipo de variante. En cambio, estas  pruebas de COVID-19 confirman si las personas están infectadas con COVID-19, independientemente de  la variante. Variantes como Delta mutan principalmente en áreas del virus a las que no se dirigen nuestras pruebas.

El Dr. Oscar Guerra, Director Médico Regional del negocio de Diagnóstico de Abbott informó que “para averiguar qué variante contiene una muestra de COVID-19, se realiza un proceso más  complejo y que requiere mayor tiempo. llamado secuenciación genómica. Este análisis no se realiza en todas las muestras, debido a la gran cantidad de pruebas de COVID-19 que se procesan todos los días, para brindar a las personas, resultados que permitan tomar decisiones informadas”.

Agregó que “Abbott sigue confiando en que nuestras pruebas pueden detectar variantes a medida que surgen, y nuestros científicos continúan estudiando nuevas variantes y aseguran de que nuestras pruebas sigan siendo efectivas”.

Mito 2: Las pruebas de PCR son más sensibles que las pruebas de antígenos para saber si tengo COVID.

Las pruebas de PCR y las pruebas de antígenos se pueden utilizar en diferentes escenarios. Ninguna prueba es la solución milagrosa. Necesitamos diferentes tipos de pruebas para diferentes situaciones y entornos. Es mejor pensar en ellos como pruebas complementarias que le dan a una persona la imagen más clara posible sobre si tiene COVID-19 o no.

Las pruebas de PCR son muy sensibles y buscan material genético mediante una reacción en cadena de la polimerasa y pueden detectar incluso lasmás pequeñas cantidades de COVID en su cuerpo. Estas pruebas no se realizan con tanta frecuencia como las pruebas de antígenos debido a su mayor costo y requisitos de tiempo. Los resultados pueden tardar unos días porque estas pruebas a menudo se analizan en un lugar diferente al que se le tomó  la prueba de COVID. Debido a que el procesamiento de las pruebas de PCR lleva más tiempo, es un desafío tomar medidas inmediatas en función de los resultados.

El Dr. Guerra sostuvo que “las pruebas de antígenos ayudan a identificar a las personas cuando son más contagiosas. Debido a que estas pruebas buscan proteínas en lugar de material genético, son más rápidas que la mayoría de las pruebas moleculares. Nuestra  prueba rápida de antígeno, Panbio Covid 19 ,es un test inmunocromatográfico cuyo resultado se obtiene entre 15-20 minutos una vez que se corre el ensayo. Es idónea para la detección a tiempo, tanto de casos positivos en fase aguda de la enfermedad como de asintomáticos. Además, la posibilidad de trabajar con hisopado nasal representa una mayor facilidad para la implementación del test”.

Mito 3: Una prueba de COVID-19 negativa significa que no estoy infectado ni contagioso.

El resultado de una prueba es una instantánea en el tiempo, por lo que puede dar negativo a principios de la semana, pero dar positivo más tarde, a medida que el virus se multiplica en su cuerpo. Al momento en que su prueba dio un resultado negativo , pudo haber sido cuando su carga viral (la cantidad de virus presente en su cuerpo) no fue suficiente para que la prueba indicara que es positivo para COVID-19.

Según el Ministerio de Salud, en los pacientes con alta sospecha clínica y epidemiológica de COVID-19 y menos de 7 días de síntomas, se sugiere el uso de test rápidos de antígenos como alternativa a la disponibilidad oportuna del examen de PCR para confirmar el diagnóstico de COVID-19, pero no para descartarlo.Un resultado negativo del test de antígenos, en contexto de una alta sospecha clínica, no descarta la enfermedad. En este caso, las personas deben ser derivadas para la realización de un examen de PCR, o bien, si esto no es posible, iniciar las medidas de aislamiento y manejo establecidas por la autoridad sanitaria.

Es importante seguir los consejos de su proveedor de atención médica al evaluar los resultados de las pruebas.

Mito 4: Más pruebas de COVID conducen a un aumento en los casos de COVID-19.

Las pruebas de COVID no producen que más personas den positivo. Si más personas en una comunidad dan positivo, por consiguiente, la transmisión es alta en esta comunidad. Los aumentos repentinos de COVID-19 son representativos de un aumento de infecciones y enfermedades graves. La identificación de un aumento repentino puede ayudar a una comunidad a mitigar una mayor propagación.

Las pruebas brindan a la población la tranquilidad que necesitan a medida que los casos de COVID-19 aumentan a nivel mundial. Ya sea que elija realizar la prueba en una clínica de salud o en su casa, sepa que la prueba es una forma segura y eficiente de mantenerse informado y de protegerlo a usted y a sus seres queridos.

En esta línea, la Dra. Cecilia Tapia, experta en diagnóstico molecular y coordinadora de enlace de laboratorio de la Clínica Dávila, expresó que “la manera más rápida de saber si  se tiene infección contagiante por SARS- Cov-2 es mediante un test rápido de antígeno. Actualmente, la población tiene la oportunidad de poder realizarse la prueba por sí misma, como nunca antes. Tener la capacidad de realizar este tipo de pruebas ha ayudado a muchas familias a afrontar la pandemia con mayor confianza”.

Se parte compartiendo