Prevención en los más pequeños: Evite accidentes en piscinas durante esta temporada

La supervisión permanente de los niños más pequeños, aun cuando usen alitas o flotadores, es clave y puede salvar vidas.

Ya comenzó la época de calor y cada día son más los planes con actividades al aire libre, salidas a la playa y por supuesto el uso de piscinas, que en muchos condominios ya fueron inauguradas. Panoramas atractivos, pero que conllevan algunos riesgos que conviene tener en cuenta para prevenir sus consecuencias sobre la salud, sobre todo de los niños más pequeños. De hecho, uno de los mayores riesgos que revisten las piscinas es la asfixia por inmersión, que de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), constituye la tercera causa de muerte por traumatismo no intencional en el mundo y representa un 7% de todas las muertes relacionadas con traumatismos. Se calcula que, a nivel global, mueren cada año por esta causa 360.000 personas.

En esta línea, la directora Médica de la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), Susana Olate, hace énfasis en que los niños son quienes corren mayor riesgo y explica: “si hacemos foco en los niños, según la Academia Americana de Pediatría (AAP), después de los defectos de nacimiento, la asfixia por inmersión es la primera causa de muerte en personas entre 1 y 4 años y la mayoría de los casos suceden en piscinas caseras (propias o de amigos, vecinos)”.

La doctora agrega que, en Chile, es la segunda mayor causa de muerte accidental en niños de esa misma edad y la tercera en personas de 5 a 19 años. Por lo anterior, entrega las siguientes recomendaciones para disfrutar de manera segura las piscinas:

  • Los niños siempre deben tener supervisión. Se debe asignar un vigilante e idealmente que éste tenga la capacidad de identificar una situación de emergencia y saber cómo reaccionar frente a ella.
  • Cero distracciones. Es necesario hacer énfasis que en sólo 27 segundos ya un niño empieza a ahogarse y en 3 o 5 minutos se corre el riesgo de generar graves secuelas o incluso fallecer.
  • Observar cada 10 segundos a los menores en la piscina y no tardar más de 20 segundos en llegar a ellos en caso de asfixia por inmersión, relevando el concepto de asistencia lo más precoz posible.
  • Respecto del uso de chalecos salvavidas, se recomienda siempre y cuando sean de su talla y cuenten con certificación de calidad, y no reemplaza las medidas antes mencionadas.
  • Se recomienda que padres y cuidadores cuenten con capacitación en maniobras de RCP.
  • Verificar que el área de piscina se encuentre limpia de juguetes o atractivos para los niños, esto incluye las pequeñas piscinas portátiles, pues bastan 5 cm de agua para que un niño se ahogue y al tener distractores existe mayor riesgo de que los niños se acerquen sin supervisión.
  • Clases de natación, si bien se recomiendan a partir del año no es una medida por si sola para mitigar el riesgo.
  • Finalmente es importante destacar que el uso de flotadores, alitas, tablas u otros elementos flotantes no son recomendados, dado que pueden brindar una falsa sensación de seguridad, pero no la proporcionan, y no reemplazan la vigilancia permanente.
Se parte compartiendo

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *