Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) desde el año 2019 esta ave se encuentra en estado de “Menor riesgo” y está presente en Brasil, Paraguay, Uruguay, Argentina y Chile.
No fueron sólo los deportistas de las diversas disciplinas los más ovacionados durante la última versión de los exitosos Juegos Panamericanos Santiago 2023, sino que además otro que se robó las miradas y el cariño de todo el público fue la mascota oficial del certamen “Fiu”. Inspirado en el ave de siete colores, presente en gran parte del territorio nacional, este ícono terminó llevándose la admiración, sobre todo de los más pequeños que disfrutaron de estos juegos.
Cabe señalar que esta pequeña ave conocida comúnmente como Siete colores (Tachuris rubrigastra), pertenece al Orden de los Passeriformes, de la Familia Tyrannidae y del Género Tachuris. En Chile se distribuye desde la región de Atacama hasta Aysén y su hábitat son principalmente juncales y totorales de zonas de aguas poco profundas, como lagunas, tranques y vegas.
Es una especie que mide entre 10 a 11 cms, pesa alrededor de 10 gramos. Su cabeza posee una corona negra con una línea roja central y líneas amarillas a los lados. Según el sitio www.avesdechile.cl “en la cara tiene un triángulo negro azulado desde el pico hasta las auriculares. La garganta es blanca, el pecho y el abdomen son amarillos y están divididos por una banda negra incompleta en el centro. El lomo es verde amarillento, las patas son negras y sus ojos celestes.”

Humedales: Principal hábitat del Siete Colores
Sharon Montecino, coordinadora del Programa de Aves Acuáticas y Humedales de la Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre de Chile (ROC), explicó que “el sietecolores desarrolla toda su vida en humedales, por lo que estos ecosistemas son indispensables para ellos. Aunque esta ave no está en alguna categoría de amenaza en Chile, los humedales donde habita sí están siendo fuertemente afectados por acciones humanas que provocan su deterioro y pérdida.”
Por ello, la profesional hizo el llamado a “conservar esta maravillosa y carismática especie de ave, lo que implica mejorar nuestras conductas, no dejando basura ni hilos de pesca ni de volantines en humedales, ni llevando mascotas a estos frágiles ecosistemas que causan disturbios en su ambiente”. Además, señaló que para observar al siete colores, se sugiere el uso de monocular o binoculares, un acercamiento pausado, sin emitir ruidos molestos. En caso de encontrar nidos, mantener la distancia y procurar alejarse cuanto antes para no perturbar a los adultos ni interrumpir la incubación, ya que algunos disturbios podrían causar que abandonen el nido o las crías.”
Por su parte, Marcelo Olivares director de la ONG Red Aves recalcó que “es interesante destacar que Fiu, como se denomina, ha podido ser admirado en toda Latinoamérica y el Caribe. En la región de Coquimbo lo podamos encontrar en los humedales costeros particularmente los que están entre Pichidangui y la Bahía de Coquimbo (…) En la versión año 2023 del Global Big Date, que es el conteo de aves, tuvimos la posibilidad de avistar 10 ejemplares del Siete colores en la desembocadura del río Elqui y en la laguna que está al interior de la estancia El Tangue. Con esto la región pudo sumar 159 especies y ubicarse en el segundo lugar nacional.”
Finalmente, el Seremi del Medio Ambiente Leonardo Gros, sostuvo que “la gran visibilidad y cariño que ha despertado en las personas la participación del ave siete colores como mascota de este gran encuentro deportivo, es una oportunidad que nos permite valorar los humedales como centros de vida y seguir promoviendo su cuidado. La idea es que esta hermosa ave sea considerada como un emblema de la sustentabilidad y del resguardo de nuestros humedales, ecosistemas únicos donde vive esta especie. Es nuestro deseo aprovechar que este gran cariño expresado por la ciudadanía se refleje en una acción diaria, cotidiana y permanente de respeto y cuidado de los humedales”.